Ya lo hemos dicho en otras ocasiones: el lector NO ES UNA VARITA MÁGICA, aunque definitivamente lo parece pues brinda múltiples posibilidades de trabajo y garantiza la obtención de información fidedigna que puede ser usada de variadas maneras.
Para empezar debemos decir que la función principal del lector es escanear la identificación electrónica. Adicionalmente, permite el guardado de datos en su memoria interna. Esto ayuda a la hora de tener un control de las tareas realizadas en el establecimiento, control de stock e, incluso, sirve como una auditoría ante cualquier requerimiento.
El lector puede vincularse con otros dispositivos, de diversas marcas y sistemas, via bluetooth. Veamos algunos ejemplos:
Pesaje mecánico: balanza mecánica → registro manual de peso en el lector → envío vía bluetooth a un celular → envío vía mail o whatsapp a cualquier otro dispositivo.
Pesaje electrónico: lector → conexión vía bluetooth a balanza electrónica → descarga de la información, por la mísma vía, a un celularr → envío por internet o vía cable usb a una PC.
Control reproductivo con ecógrafo: Envío de la identificación del animal desde el lector hacia un celular → Envío desde el celular al ecógrafo portatil, que genera la ecografía con su respectiva identificación oficial.
Impresora portatil: el lector lee la caravana y transmite, vía bluetooth, la identificación a la impresora → impresión de etiqueta con la información de la caravana oficial (numérico y/o en forma de código de barras), para ser adherida a muestras que se envían al laboratorio.